Tenía que hacerle un regalo a una amiga y me costó muchísimo decidirme. Ella también cose y borda, y lo hace todo estupendamente, así que me resultaba todavía más difícil elegir. Me estudié todos los libros con los que me he hecho en los últimos meses y son unos cuantos, creedme. Finalmente me decidí por este guardabloques para labores de punto de cruz o de patchwork, eso sí, pequeñitas. El tamaño del guardabloques es aproximadamente el de un folio. Es del libro L'Atelier de Lilie, de Valerie Caterin, que compré en L'Aiguille en Fête en París en febrero del año pasado. El libro es una preciosidad, tiene montones de proyectos, a cada cual más bonito.
Como separadores puse tres hojas de fieltro blanco.
Cambié el texto del letrero del bordado para personalizarlo con el nombre de mi amiga, pero por lo demás es bastante fiel al original. Hace ya unas semanas que lo terminé, pero no podía enseñároslo hasta que estuviera en manos de su destinataria. Ahora ya está en su poder y parece que le ha gustado mucho.